Italo Svevo, judío converso de Trieste, autor de La conciencia de Zeno, que vivió entre 1861 y 1928, fue director comercial de una compañía de pintura de Trieste, la Societá Venziani, que pertenecía a su suegro y que se disolvió hace unos años. Trieste perteneció a Austria hasta 1918, y esa compañía era famosa por suministrar a la marina austriaca una excelente pintura anticorrosiva, para las quillas de sus buques. A partir de 1918 Trieste pasó a Italia, y la pintura empezó a suministrarse a las marinas británica e italiana. Para poder relacionarse con el Almirantazgo, Svevo acudió a que le diera clase James Joyce, cuando éste enseñaba inglés en Trieste. Se hicieron amigos, y Joyce ayudó a Svevo a encontrar editor para su obra. El nombre de marca de la pintura anticorrosiva era Moravia. Que este nombre coincida con el seudónimo del otro novelista no es fortuito: tanto el empresario de Trieste como el escritor romano lo tomaron del apellido de un pariente común, por parte de madre.
PRIMO LEVI, entrevistado por Philip Roth en 1986 y recogido en El oficio: un escritor, sus colegas y sus obras, DeBolsillo, 2009, traducción de Ramón Buenaventura.